12/05/2005 |
PROSPERIDAD Y ABUNDANCIA |
LA INMENSA mayoría de los seres humanos aspiramos a mejorar y a lograr abundancia en nuestras vidas. Eso lo percibo a diario sobre todo en nuestro sistema de libre empresa y democracia. Pero me pregunto: ¿Por dónde se empieza? Esta pregunta es sin duda la que nos viene a la mente de forma natural cuando uno desea lograr abundancia y prosperidad. Soy de los que pienso que para lograr cualquier cosa en la vida incluyendo riqueza y abundancia debemos empezar por creer que uno lo puede lograr. La creencia es la base para obtener cualquier cosa. La educación, la sociedad y nuestro propio condicionamiento intelectual o sea pensamientos, por lo general con más negatividad que optimismo, nos inclinan a creer que la riqueza y la abundancia son para otros. Por lo general no creemos realista ser soñador y por consiguiente caemos en lo que yo llamo "la zona del conformismo". Nos conformamos con lo que tenemos. Si bien es cierto que hay que agradecer lo que se tiene, no es menos cierto que para crecer y aspirar a alcanzar el "próximo nivel" hay que establecer y poner en práctica un plan de acción.
En realidad es evidente que las personas exitosas y con abundancia en primer lugar creyeron que podían hacerlo. No solo debe usted convencerse profundamente de que es posible alcanzar abundancia según sus aspiraciones y necesidades, sino que además es simple. Es más simple de lo que cree. En realidad prácticamente todos los días se nos presentan ideas lucrativas que no aprovechamos probablemente porque no hemos desarrollado ese olfato o sexto sentido para reconocerlas. Esas cualidades usted las tiene solo que no las reconoce y por lo tanto no ha aprendido a utilizarlas.
Debemos programar nuestra mente para el éxito de igual forma que se programan las computadoras. Introduzca en su mente pensamientos de abundancia y prosperidad y su mente le guiará en el plan de acción que se necesita para lograr el éxito en nuestro camino a la abundancia. Para programar nuestra mente debemos empezar eliminando esas barreras limitantes que se han depositado en ella durante toda nuestra vida.
Estas barreras limitantes o paradigmas negativos son los que en muchas ocasiones nos frenan e impiden nuestro avance. El 80% de los obstáculos que nos encontramos en nuestro camino a la abundancia son mentales. O sea, son creados por nuestra mente y si lo que has programado en ella es negativo, de ahí se alimentan dichos obstáculos. Debemos erradicarlos y para ello primero tenemos que identificarlos.
He aquí algunos de esos pensamientos limitantes que abundan.
Antes era mucho más fácil. Cuántas veces has escuchado o incluso has dicho esta frase. Es una buena excusa para no movernos y quedarnos en el conformismo. La realidad es que nunca antes en la historia de la humanidad se tienen tantas oportunidades como hoy día. ¿Sabías que solamente en los Estados Unidos hay un promedio de más de cuarenta nuevos millonarios al día? El que busca, encuentra. Soy muy joven/viejo. La excusa de la edad es otro de los paradigmas que se interponen entre la usted y la abundancia. La abundancia no mira edad. Hay cientos de personas que ya sea muy jóvenes o bastante mayores han logrado sus metas y aspiraciones. Ejemplos de esto son Michael Dell ( millonario antes de los 35 años) y Ray Kroc, creador del imperio McDonald's que logró fortuna después de los 65 años. No tengo dinero. Está sí es clásica. Querer es poder así que lo importante no es si tengo el capital para desarrollar ese proyecto soñado. Lo importante es querer echar hacia delante y como consecuencia del nivel de pasión que le imprimas, el dinero aparecerá. De eso viven las instituciones financieras. Para aportar ejemplos basta con saber que figuras históricas trascendentales como Aristóteles Onassis, John Rockefeller, Walt Disney y Henry Ford comenzaron sus negocios sin un solo centavo. No tengo estudios. La educación es fundamental e importante en nuestras vidas pues nos facilita el camino hacia la abundancia. Sin embargo, con frecuencia pensamos que para lograr abundancia y prosperidad tenemos que tener una alta educación superior e incluso llegamos a pensar que si proviene de las más prestigiosas universidades tenemos todo garantizado. También es un paradigma limitante pues la única garantía de éxito la estableces tú con tus ideas, actitudes, plan de acción y mucho, mucho trabajo. Hay personas con alta educación que viven una vida de escasez y personas con poca educación que han logrado sus más preciados sueños. No permitas que nadie limite tus oportunidades por razón de que no tengas estudios superiores. Echa pa'lante y no te detengas.
En fin, podemos llenar una inmensa lista de los pensamientos que nos impiden en nuestra mente creer que somos no sólo capaces de alcanzar una vida de abundancia sino que nos conducen a una vida de conformidad que se puede tornar miserable. Sacúdete de estos malos pensamientos. Cámbialos por pensamientos de grandeza y de entender que tú puedes. Hazte amigo íntimo de la lectura y busca mentores que te estimulen a producir ese cambio poderoso que te conduzca por el camino de la abundancia. Yo creo en ti. Lo vas a lograr si te lo propones. ¡Qué grande eres! |
Escrito por Mente Cuerpo Y Emociones @ 12/05/2005 03:10:00 p.m. |
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